El Nuncio Apostólico en Siria, en una larga conversación con Vatican News, da una visión general de la situación económica, social y política del país casi en su noveno año de guerra. Pobreza, desempleo, escombros y sobre todo relaciones seriamente arruinadas: en todo esto la Iglesia permanece al lado del pueblo y reconstruye sin dejar nunca de creer que el desierto florecerá de nuevo.