Los jóvenes encuentran en los abuelos un apoyo firme en su fe y sentido para su vida



(RV).- En su catequesis de la audiencia general, celebrada el segundo miércoles de marzo en la Plaza de San Pedro, el Papa Francisco continuó sus reflexiones sobre la familia, refiriéndose en esta ocasión, a la importancia que tienen los abuelos en la familia y en la sociedad.

El Obispo de Roma se refirió a esta etapa especial de la vida que, en cierto sentido, dijo, es novedosa también para la espiritualidad cristiana, destacando que las personas mayores también tienen una misión que cumplir y una gracia especial que llevar a cabo siguiendo al Señor en cada circunstancia.

El Papa Bergoglio destacó que el Evangelio de Lucas nos habla de los ancianos Simeón y Ana, siempre atentos en espera de la venida del Mesías, que cuando lo reconocieron  recibieron nuevas fuerzas para bendecir a Dios con un hermoso cántico de alabanza.

Y dijo que también los abuelos del tiempo actual están llamados a formar un coro permanente en el gran santuario espiritual de nuestro mundo, acompañando con su oración y testimonio a quienes luchan en la vida.

Tras destacar que la oración de los mayores representa un gran don para la Iglesia, con la sabiduría de sus palabras, Francisco afirmó que el corazón de los abuelos, libre de resentimientos pasados y de egoísmos presentes, tiene un atractivo especial para los jóvenes, que esperan encontrar en ellos un apoyo firme en su fe y sentido para su vida.

(María Fernanda Bernasconi – RV).

Resumen de la catequesis del Papa Francisco para los fieles de nuestro idioma:



Queridos hermanos y hermanas:

La catequesis de hoy está centrada en la importancia que los abuelos tienen en la familia y en la sociedad.

Ciertamente, se trata de una etapa especial de la vida y, hasta cierto punto, novedosa, también para la espiritualidad cristiana. Pero el Señor nos llama a seguirlo en todos los momentos y circunstancias. Las personas mayores también tienen una misión que cumplir y una gracia especial para llevarla a cabo.

El Evangelio de Lucas nos habla de los ancianos Simeón y Ana, que estaban en el Templo de Jerusalén, siempre atentos en espera de la venida del Mesías. Y, cuando lo reconocieron en el Niño Jesús, recibieron nuevas fuerzas para bendecir a Dios con un hermoso cántico de alabanza y anunciar la liberación a todo el pueblo.

Como ellos, los abuelos de hoy están llamados a formar un coro permanente en el gran santuario espiritual de nuestro mundo, a sostener con su oración e infundir ánimo con su testimonio a cuantos luchan en el campo de la vida. La plegaria de los mayores es un gran don para la Iglesia; y sus palabras, una inyección de sabiduría para la sociedad, muchas veces ocupada en mil cosas y distraída de lo esencial.

El corazón de los abuelos, libre de resentimientos pasados y de egoísmos presentes, tiene un atractivo especial para los jóvenes, que esperan encontrar en ellos un apoyo firme en su fe y sentido para su vida.

Saludo a los peregrinos de lengua española venidos de España, Puerto Rico, Argentina, México y otros países latinoamericanos. Queridos hermanos, cuánto me gustaría que la Iglesia pudiera superar la cultura del descarte, promoviendo el reencuentro gozoso y la acogida mutua de las distintas generaciones. Recemos todos por esta intención. Gracias.

(from Vatican Radio)