El Santo Padre saludó con especial afecto a los chicos y chicas de la Acción Católica, congregados para concluir la iniciativa de la «Caravana de la Paz», que desde hace 41 años y con el apoyo del Sucesor de Pedro, recorre las calles de Roma clamando por la paz. Además el Pontífice dirigió unas palabras especiales por el Día Mundial de los enfermos de Lepra, e invitó a rezar por el 75° aniversario de la liberación de Auschwitz que se cumple mañana, pidiendo en el corazón que «nunca más» se repita una tragedia como esta.