El subsecretario del Departamento para el Servicio de Desarrollo Humano Integral profundizó sobre dos retos actuales: por un lado la Evangelización, es decir, «trasmitir la fe de padres a hijos y a las futuras generaciones» y por otro, lograr un buen sistema educativo con el fin de conseguir «que el fuego de los jóvenes, la llama propia que llevan dentro, no se apague por la uniformidad ni por el burguesismo de una sociedad de consumo».