“Las vulnerabilidades macroeconómicas requieren criterios diferentes de los que gobiernan el mundo financiero actual. Esto significa un cambio en la forma de hacer negocios, que a su vez alterará la forma de hacer política, para lo cual también será necesario un cambio en nuestros estilos de vida”, dice el Nuncio Bernardito Auza ante la Asamblea de Naciones Unidas.